Este verano ha sido un verano un tanto especial para mi. El pasado mes de julio me incorporé en la Dirección del Consorcio de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos (CTP). La visión que yo tenía de la CTP era una visión más bien territorial (más de 200,000 km2 compuestos por las 4 comunidades autónomas españolas, 3 regiones francesas y Andorra que comparten el Macizo Pirenaico). En tres meses, esta visión ha cambiado. Ahora veo la CTP desde una vertiente más humana. Una gran familia de más de 15 millones de habitantes que cooperan entre sí, que se conocen, que trabajan juntos, que se intercambian, que aprenden los unos de los otros … para el desarrollo de este territorio transfronterizo y especialmente para mejorar día a día su calidad de vida.