Las soluciones basadas en la naturaleza del proyecto PHUSICOS ya han demostrado su utilidad en los Pirineos: desde 2019, los casos piloto de Santa Elena y Artouste han servido de laboratorio para una práctica que permitirá evitar la caída de bloques sobre la carretera que une España y Francia por el Portalet. Gracias a las soluciones aplicadas, basadas en la construcción de aterrazamientos y en el uso de elementos naturales de madera y piedra, se evitan los riesgos minimizando la afectación del paisaje y con un limitado impacto ambiental.

Los días 11 y 12 de abril, en Laruns (Pyrénées-Atlantiques), se han presentado los resultados de cuatro años de trabajo en los Pirineos durante un seminario organizado por el Observatorio Pirenaico del Cambio Climático de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos en colaboración con la Alcaldía de Laruns (Francia) y la Asociación Española de Ingeniería del Paisaje, miembro de la Federación Europea de Bioingeniería del Paisaje.

Las jornadas han incluido un curso de formación sobre los riesgos naturales en los Pirineos, técnicas de bioingeniería, ejemplos de construcciones y un taller práctico sobre maquetas, además de una visita a los trabajos realizados en el marco del proyecto PHUSICOS.